Se trata de un producto muy maduro en su concepción, donde la calidad general de esta moto de origen chino está en lo más alto de lo que aquella enorme industria puede ofrecer para este segmento. Kiden es una marca nueva en nuestro mercado, por lo cual hacer las cosas bien con esta KD150-Z es fundamental para la compañía. De tal manera, esta moto se ofrece actualmente con un agresivo precio de venta que la posiciona muy bien frente a sus rivales, además de estar incluida en el programa “Mi Moto” para la compra de unidades de ensamble nacional en 48 cuotas fijas.

Volviendo un poco a la calidad de KD150-Z y para entender que hay detrás de esta marca y modelo, es justo mencionar que Kiden es parte del conglomerado chino Tayo, el mismo que es propietario de Zontes y es por eso que podemos ver cierta similitud en los diseños, paletas de colores y algunas terminaciones. Ojo, en Argentina nada tienen que ver los representantes de Kiden con los de Zontes.

Sin entrar en todos los detalles que pueden encontrar en la prueba que le hicimos a fondo a esta Kiden, en cuanto al equipamiento cuenta con iluminación full LED, freno a disco en ambas ruedas, caballete central, y una parrilla trasera muy generosa y robusta.

La ergonomía es uno de los puntos fuertes de esta moto, con una postura del tipo “utilitaria” que nos permite pasar largas horas de acá para allá en la ciudad sin que le pase factura a nuestro cuerpo. En ese sentido, de las mejores. Su bajo consumo la postula como una opción a tener en cuenta para quien busque un vehículo económico. Pero donde no tiene rival es en la autonomía, con un tanque de interminables 18 litros.

Después de conocerla y probarla, nos pareció un modelo muy apto para quienes deban cubrir necesidades de transporte diario o estén en la búsqueda de su compañera de trabajo. Hoy es una oportunidad muy conveniente por lo que ofrece y vale, una cuestión no menor para los tiempos que corren.